El año de la muerte de Manuel Ray Olvido-Parte 2

     

    La vida se desvanece entre jadeos, ojos abiertos que miran al vacío, palabras en la frente, la vida se desvanece mientras las dos mujeres van en ayuda. Luego todo es final. Final y adiós, último suspiro que no puede ser palabra y tú estás ahí y te invade la tristeza nunca vista, tal vez leída pero alejada de este momento real donde no tiene cabina nada más. Y su rostro lánguido, lleno de pena, una pena que estás viendo y recibida como un hallazgo lleno de cosas que no llegas a concebir en palabras.

    La realidad mucho más intensa que cualquier lectura del pasado. Besabas hojas, hoy besas una mejilla helada, aunque no mucho, mejilla que afeitaste el día anterior donde él tersaba el labio para dejarse acariciar como nunca antes.

    Le preguntabas y él decía algo que no podías traducir, no había idioma para deletrear ese rostro. Ahora recuerdas su cara, su mirada, sus ojos y sabes que te acompañarán siempre. El dolor no tiene apellidos. 

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